Las fibras de colágeno son uno de los componentes estructurales más abundantes en la dermis o capa profunda de la piel. Esta red de fibras aporta sostén a la piel, y junto con la proteína elastina, le dan elasticidad y resistencia. Ambos componentes son sintetizados por las células denominadas fibroblastos, las cuales también forman parte del tejido conectivo en la dermis.
Se han identificado 28 tipos diferentes de colágeno, de los cuales el colágeno tipo I es el más abundante y común en la piel, uñas, pelo, huesos, vertebras, tendones y córnea. El colágeno tipo II está presente en los cartílagos, vertebras y vítreo del ojo. El colágeno tipo III, es el segundo más común, presente en la piel, tejidos musculares, venas, intestino, y en algunas glándulas del cuerpo.
Irene
pielsana